Y es que el mal uso de este medio llega a niveles que superan las expectativas con amenazas e intimidaciones donde los criminales obtienen información de los jóvenes a través de las redes sociales con imágenes y videos que los menores abren sin saber a lo que se exponen, reveló Adriana Jiordana, gerente de soluciones al consumidor de la empresa McAfee.
Según el estudio, 29% de los adolescentes descargan programas peligrosos sin el conocimiento de sus padres. Foto: Archivo Sol de México |
Es importante generar una cultura de educación en el uso de la cibernética, sobre todo en los menores, explicó en entrevista con El Sol de México.
Los estudios de la firma californiana, revelan que el 29 por ciento de los adolescentes descargan programas peligrosos sin el conocimiento de sus padres, y el 45 por ciento de éstos son menores de entre 16 y 17 años de edad, comentó Jiordana.
La vulnerabilidad de los menores consiste en que creen fácilmente lo que les dicen en las redes sociales y un adolescente puede tardar sólo ocho minutos en desvestirse ante la petición de personas pertenecientes al crimen organizado, reveló Jiordana.
La ejecutiva mencionó que los estudios de McAfee indican que 20 por ciento de los jóvenes ha sufrido algún tipo de ataque por esta vía y el 52 por ciento mencionó conocer a alguien que ha tolerado un ataque de este orden, advirtió.
Jiordana detalló las soluciones de la firma para proteger a las familias, con el "family protection", que previene, orienta y educa a los integrantes para evitar caer en estas circunstancias.
Es necesario mantener una buena comunicación con los menores, adquirir una cultura basada en la confianza; mantener un monitoreo de las actividades de los adolescentes cuando ingresan a la red y los sitios Web que visitan con mayor frecuencia, concluyó.
oem
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