Recluta crimen a deportados

Cd. de México (24 octubre 2011).- Migrantes deportados por Estados Unidos están siendo reclutados por el crimen organizado.

Cada año, cientos de miles de migrantes de otros países,
son deportados sin control a México por parte de las autoridades de EU.
Foto: Miguel Cervantes

Al condenar la política migratoria estadounidense, que igual abandona en el País a connacionales que a extranjeros, el Gobierno de Tamaulipas señaló que cuenta con reportes de que las bandas se están reforzando con los expulsados.

El Secretario General de Gobierno, Morelos Jaime Canseco Gómez, explicó que los deportados llegan a las filas de la delincuencia no sólo para realizar actividades ilícitas en México, sino también en Estados Unidos.

"Las bandas de delincuentes", dijo Canseco, "(buscan) reintroducirlos a la economía estadounidense".

En muchos casos, advirtió, los grupos criminales obligan a los migrantes a unírseles y realizar las actividades más vulnerables de la organización.

"Pueden ser presas o lo han sido", afirmó. "De hecho ya hay testimonios de ello".
Además, subrayó, los deportados son víctimas de la trata de personas.

EL NORTE publicó ayer que, cada año, unos 300 mil extranjeros, muchos con antecedentes penales, son abandonados por Estados Unidos en Tamaulipas, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja California, según cifras de la Conferencia Legislativa Fronteriza.

Además, esos Estados fronterizos reciben unos 700 mil deportaciones de nacionales al año.

Funcionarios y expertos coincidieron en que el desorden migratorio se ha convertido en una carga para las entidades.

Canseco dijo que Tamaulipas espera 130 mil expulsados este año, 30 mil más que en el 2010.

Tras afirmar que su Gobierno realiza su parte al apoyar a los deportados, Canseco urgió a que Estados Unidos haga las expulsiones de forma ordenada y proporcione más información.

De esta forma, explicó, se podrá identificar a los extranjeros y ofrecerles transportación a sus lugares de origen, además de que se podría recibir con precacuciones a los deportados que son ex presidiarios.

En Chihuahua, el sacerdote Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante de Ciudad Juárez, resaltó que los migrantes se han vuelto muy vulnerables al crimen, por lo que desde hace un par de meses se les pide no abandonar el albergue.

"Nos ha tocado que salen a conseguir trabajo y ya no regresan", narró el sacerdote.
Los desaparecen dos, tres días", explicó. Vienen golpeados, o ya no los hallamos.

"Quién sabe qué pasaría", agregó. "Mucha gente nos dice que lo agarró el narco, que lo agarró algún grupo. Otras personas, que lo secuestraron".

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